Car and Driver participa en varios programas de afiliación de marketing, lo que significa que Car and Driver recibe comisiones de las compras hechas a través de los links a sitios de los vendedores.

Dado su papel fundamental en la lubricación, el aceite del motor es un elemento básico para tu coche que también sufre con temperaturas extremas. Un experto nos da algunos consejos.

Sin duda se trata de una de las operaciones más importantes a tener en cuenta en el mantenimiento de nuestro coche, revisar el nivel del aceite, y si es necesario, cambiarlo. siempre de acuerdo con las especificaciones del fabricante.

También es necesario elegir el tipo de lubricante adecuado para que el motor funcione lo mejor posible sobre todo en pleno verano, donde las altas temperaturas suponen todo un reto para este elemento. Pero, ¿qué se debe tener en cuenta? Nos los explica Fausto Lupone, Automotive Sector Expert en Petronas Lubricants International

Su función principal es la lubricación de diferentes piezas del motor y de esta forma evitar que con el tiempo se produzca el desgaste de componentes críticos y que a la vez no se generen residuos.

Tal y como señala Lupone, "los lubricantes de alta calidad tienen la mejor formulación y no permiten la acumulación de 'lodos' pegajosos, causados por la degradación del aceite que arruinan el motor. Esto significa que las piezas mecánicas pueden moverse con suavidad, reducir la fricción y mantener el motor frío". Gracias a este funcionamiento correcto del motor, además de optimizarse el rendimiento también se ahorra en el consumo de combustible.

Lo cierto es que hay gran cantidad y variedad de lubricantes, pero si se recurre a uno básico de calidad mediocre probablemente con el paso del tiempo se generen sedimentos perjudiciales en el motor que causen más daño que beneficio.

Hay que tener en cuenta que los motores modernos funcionan en esta época del año a temperaturas más altas que nunca, a lo que se añaden posibles atascos de tráfico en los que se producen constantes arranques y paradas y someten al motor a un estrés continuo.

Se da la circunstancia de que, al contrario que sucede con la temperatura del agua, que se puede comprobar en la instrumentación del coche, este calor excesivo no aparece en ningún indicador, salvo en los vehículos más deportivos, que incluso pueden llegar a equipar un radiador específico para este elemento. Lupone lo llama "problema silencioso" dado que se produce dentro del motor. No es raro que un lubricante supere de largo los 100 grados en condiciones extremas y se ponga entonces a prueba su composición que debe garantizar protección ante altas temperaturas.

"Los lubricantes desempeñan un papel fundamental en la transferencia de ese calor, y están sometidos a un ataque constante, causando la pérdida de rendimiento y dañando los componentes críticos a través de un desgaste devastador de metal sobre metal", confirma el experto.

Hay tantos aceites de motor en el mercado, que para muchos conductores elegir el adecuado puede resultar complicado, sobre todo para aquellos que no tienen conocimientos de mecánica. Lo mejor es acudir a las recomendaciones del fabricante para encontrar el mejor producto específico según el tipo específico de vehículo o de motor.

La proliferación de diferentes opciones mecánicas, con la llegada al mercado de opciones híbridas que incluyen sistemas de electrificación, hace necesario contar con opciones específicas, algo que ya ofrecen multitud de marcas de lubricantes. Cada uno de ellos tiene sus propias cualidades con formulaciones creadas según el tipo de motor.

Así lo explica Lupone: "Tomemos como ejemplo los motores eléctricos; para estos vehículos, los aceites de motor tienen que suministrar energía eléctrica de forma eficiente, al tiempo que se ocupan de la gestión de la fricción del sistema de transmisión. Lo mismo ocurre con los sistemas de transmisión automática, que tienen una presión mucho mayor en las partes vitales del motor que no son de automoción".

Otra particularidad se da en el caso de los vehículos pesados de mayor tamaño, como los camiones y comerciales en los que las altas temperaturas que alcanza el motor, la oxidación y los depósitos son problemas comunes, señala el experto, por lo que un lubricante que se centre específicamente en estas áreas es de suma importancia, ya que a menudo transportan cargas pesadas y se enfrentan a las duras condiciones de la carretera.

En ese caso hay que fijarse en características como los intervalos de mantenimiento (prolongarlos) con el fin de reducir los tiempos de inactividad imprevistos y, en definitiva, garantizar una completa flexibilidad operativa.

Si nuestro coche tiene ya años no supone ningún inconveniente utilizar un aceite de motor de última generación que se base en las especificaciones originales del fabricante. De hecho, al utilizar los aditivos más adecuados y las tecnologías más avanzadas para garantizar la protección de los motores más antiguos contra el desgaste, los lubricantes modernos pueden permitir que estos vehículos rindan al máximo. En última instancia, esto prolonga su vida útil y retrasa los procesos de eliminación que resultan muy contaminantes.

En el caso de Petronas la gama de lubricantes es bastante amplia. Aquí tienes algunos ejemplos que están a la venta en Amazon.